Me duele la cabeza, ya es algo natural en mi creo yo. Después del magnifico día que he tenido, la cabeza hace de las suyas...
No es buen momento, ahora no. Por fin he podido ver a Ella y estoy súper feliz... no puedo caer ahora.
Todo me da vueltas, la cabeza me duele hasta tal punto que no puedo dar ni un paso, las nauseas se apoderan de mi, noto como el cuerpo empieza a flojear, intento apoyarme en algún sitio pero me derrumbo. No noto mi cuerpo, me falta el aire, el dolor aumenta, todo se vuelve negro.
No tengo nada a mi alrededor, me siento como si estuviese flotando en un mar de sombras silencioso, todo esta oscuro, no veo ni mis propias manos, ¿Qué me esta pasando?
Una luz. Hay una luz en frente mía. Es una luz débil, pero es una luz en toda esta oscuridad. Tengo miedo, no se que hacer, las ganas de salir de aquí pueden conmigo. Me acerco a la luz, me siento como un niño pequeño que se acerca a alguien que no conoce. Toco la luz y todo cambia.
Estoy en un lago, dentro del agua, noto una calidez extraña, el cielo es de color verde agua, puedo escuchar pájaros cantando en la lejanía. Un extraño olor dulzón lo llena todo. Ya no siento miedo, solo cansancio y tristeza. Se que este lugar no es real, se que todo es producto de mi imaginación, pero parece tan real... es todo tan realista, tan puro, que me cuesta distinguirlo.
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