lunes, 31 de marzo de 2014

Adios.

Dejo el blog. Dejo de escribir en general. A partir de ahora el único que sabra de mí sere yo. Cada vez que escribo, algo malo pasa, sobre todo si esta relacionado con personas importantes para mí, porque soy especialista en destrozar todo lo que me importa. Hoy he muerto, he explotado a consecuencia de mirar por mí mismo. He acabado solo a causa de ser impulsivo, de no haber valorado las cosas. No merezco seguir viviendo, pero prometí a una persona, a esa persona que he destrozado que no lo haría y cumplire mi promesa. Vivire en este infierno llamado vida, vivire cada efímero momento para después recordarlo amargamente hasta que el tiempo lo borre inevitablemente.

Lo siento. No soy fuerte, ojalá lo fuese, ojalá pudiese serlo, ojalá no hubiese dicho nada. Enterrare dentro de mí este odio y este desprecio ha mi persona, sonreire, por ella, deseando que la locura no la consuma y que pese a todo sea feliz...

I love you, little hell. I'm Sorry.

miércoles, 26 de marzo de 2014

"Estabamos ella y yo, los dos solos, hacía frío pero era medio día, delante de unas columnas de piedra nos encontrábamos, los dos nos mirábamos fijamente, yo, en lo único que pensaba era cuan irreal parecía ese momento, ella, de una belleza inigualable, con sus ojos de miel absorviendome las ideas, dejándome sin habla, obligándome a conocerla mas, yo, gustoso la seguía sin saber muy bien que hacer"

Abri los ojos y un destello cegador ilumino mi rostro, los rayos del alba se cernían sobre mi partiendo un cielo encapotado de nubes negras, amenazantes. Junto a mí se hallaba la misteriosa joven del pelo blanco, me incorporé y la mire consternado. Estaba seguro de que en ningun momento anterior habíamos coincidido, sin embargo algo en ella era extrañamente familiar. Miraba pensativa al horizonte, esperando ver algo a lo lejos, sin mirarme me pregunto:

+¿Eres feliz? -dijo con una voz dulce, melodiosa.

-No. - respondí sin rodeos. Sentía que podía confiar en ella, aun sabiendo que era peligroso.

+¿Por qué no eres feliz?

-No lo se... si lo supiese..

+¿Quien es la chica que te acompañaba?

-¿Qué chica?- busque con la mirada a Lucy pero no estaba por ninguna parte. ¿Sería posible que ella la hubiese visto?

+Nada, dejalo, debes descansar pequeño, te desmayaste y sufriste un duro golpe. -dijo tocandome la cabeza, acto seguido perdí la conciencia.

En el mundo de los sueños todo es posible, desde ser un dios hasta viajar a parajes inexistentes en la realidad, pero se puede correr un gran peligro, porque en los sueños viven demonios peligrosos, pesadillas que pueden acabar con el hombre mas valiente si se hacen realidad, porqué el subconsciente es una caja de pandora que guarda todos los recuerdos de mil vidas y esos demonios son sus guardianes.

Un dulce tañido de una campana sono en mi cabeza, con energía, claro, mágico. El sonido se repitio durante un minuto, aumentando de intensidad, con cada nota mi cuerpo se revolvía de dolor, algo en mi interior luchaba por salir, dolorosamente. Me levante sobresaltado, agarrandome el pecho dolorido, sudando y con la respiración agitada. Estaba en la base de un árbol gigante, este habia sido talado y usado como "altar", alguien habia colocado en el centro una pequeña campana de cristal y junto a ella un trozo de cristal verde. Me acerque a verlo, tenía un brillo único, casi mágico.

+¿Sabes lo que es? -dijo la inconfundible voz de Lucy desde mi espalda.

-Joder, ¿puedes dejar de hacer eso? Da miedo y es molesto.

Su mirada estaba llena de odio, un odio que me dejo paralizado, el reproche de su mirada era comprensible, hasta ese momento no había caído, me faltaba algo. La chica del pelo blanco habia cogido algo demasiado valioso, una llave,  y ahora se disponía a abrir la puerta de esa llave, debía de impedirselo, pero...¿me daría tiempo?

martes, 25 de marzo de 2014

Welcome

Estaba tumbado junto a una hogera, observando el cielo sin estrellas, no corría brisa alguna, junto a mí Lucy se entretenía con un pájaro, el cual no podía volar, tenía un ala rota, pobre. No paraba de darle con un palo haciendo que este diese saltitos inútilmente intentaba huir de su torturadora.

-¿Te gusta hacerlo sufrir?

+¿Sufrir? ¿Quien dice que sufra?-respondió sin mirarme.

-¿Te gustaría que te rompiese un brazo y después te diese patadas?

+¿Serias capaz de hacertelo a ti mismo?

Calle. Era obvio que no.

+Me lo temía. Dejame en paz y sigue con lo tuyo.

Cuando se ponía así era mejor dejarla, no tenía sentido hacerla entrar en razón, no lo haría. Me levante de donde estaba y me alejé en silencio, ella no me lo impidió, sabía que lo necesitaba, últimamente era lo que mas deseaba, sólo pensaba en alejarme lo mas lejos posible de aquel lugar.. ya estaba cansado, siempre lo mismo, me aburria hasta de mi mismo.

Paseando por el bosque de tristeza llegue a claro, en él pude ver como una chica entre sollozos subía por las ramas de un árbol solitario, llebaba una cuerda atada a su cuello, no paraba de decir:

-"Eres gorda, eres inútil, nadie te quiere, estas llena de cortes, eres un error, no sirves para nada, sólo sabes hacer sufrir a los demás".. - después de eso se tiro del árbol.

Un chasquido de su cuello al romperse y después silencio. Una única lágrima cayó por mi mejilla, un único pensamiento: "otro más que se va para no volver". En este lugar eso es algo cotidiano, puedes encontrar cuerpos mutilados, colgados o ahogados en pozos de aguas amargas, son muchos los. que desean dejar de vivir y otros muchos los que llegan ha hacerlo realidad, yo sería uno de ellos si no fuese que por cada vez que lo intento aparece ella para impedirlo. Si yo muero ella lo hace conmigo, pero claro, soy yo quieb siente el dolor, ella sólo lo provoca.

Abandone el lugar, dejando el cuerpo balanceandose inerte. Estaba cansado, siempre igual, siempre la misma historia, cuando acabaría toda esta mierda.

+Nunca -dijo una voz a mi espalda.

Al darme la vuelta estaba allí, detrás de un árbol, observandome con esos ojos verdes, mirando en mi interior, desmontando cada idea, cada rincón de mi ser.

-¿Puedes dejar de hacer eso? -dije, acercandome hasta donde se encontraba.

+¿Hacer qué? Sólo te estoy mirando.

Suspire.

-Dejalo Lucy... volvamos a casa.

Me dispuse a seguir andandando, de vuelta a ese infierno llamado hogar, mi brazo sangraba y cada vez me costaba más estar en pie. Pero algo paso, algo que nunca podría haber llegado a imaginar:

Los árboles se estremecieron, un fuerte viento empezo a soplar, feroz, trayendo consigo un sonido olvidado, era el dulce sonido de una campana, una campana de cristal. Alguien la estaba tocando, ¿quien podría ser? Una oleada de sentimientos y preguntas empezo ha hervir en mi interior, sin pensarlo, mis pies echaron a correr buscando el sonido de esa campana. No tarde mucho en encontrarlo, me conocía de memoria el bosque como para saber de donde procedía.

En un tronco del árbol que fue el más grande del bosque en su momento, había una joven con uns campana de cristal radiante, una capa de color rojo sangre cubría su cuerpo, su pelo de un blanco hueso olcultaba su rostro, no podía verle la cara, ya la había visto antes, pero no recordaba donde. Se dedicaba a dar golpecitos con uno de sus dedos en la campana, a cada tañido algo en mi interior golpeaba mi pecho deseando salir, lanzarse contra ella.

Uno, dos, tres... caí al suelo, inerte. Se hizo el silencio.

lunes, 24 de marzo de 2014

Un posible visitante

A veces encontramos cosas que se nos escapan a nuestra comprensión. Cosas que por mas que busquemos un significado nunca llegaremos a entender.

Era una tarde fría, había salido a pasear por mi bosque, contemplando a los colgados, observando como los cuervos sacaban sus ojos y se los comían, algunos aun luchaban por librarse de la soga, inútilmente, cuando unos graznidos me alertaron de alguien se acercaba al bosque, otra posible víctima de la desesperación. Salí corriendo a observar al nuevo invitado, era una chica de pelo castaño, mirada misteriosa y sonrisa tímida, andaba decidida, como si el bosque no la intimidase, pero claro, es un simple bosque, unos cuantos árboles viejos y rotos, no había de que preocuparse, aparentemente. Se paro a unos metros de la primera fila de árboles y se quedo mirando al interior, esperando algo, o eso me dio la impresión.

-¿Te gusta?- dijo una voz detrás mía.

+Es guapa sí, pero no me interesa.

-¿Estas seguro? A mí me parece que me estas mintiendo..

+!Calla Lucy¡ no sabes quien es, así que cierra la boca.

-Bueno señor desagradable... te dejaré ahí sentado con cara de idiota...

Al darme la vuelta encontré sus ojos verdes fijos en mí, su mirada me hizo sospechar, una chispa brillaba en sus ojos y eso era malo, si esa chica había despertado la curiosidad de Lucy había que andar con ojo, podía pasar cualquier cosa inesperada. Me volví para seguir observando a la chica, pero ya se había ido, caminaba alejándose del bosque. Me dispuse a seguir mi paseo cuando una brisa trajo una risa familiar acompañada de un extraño recuerdo, me parece que ya la había visto antes, pero no sabía en donde.

jueves, 20 de marzo de 2014

La ciudad iluminada en fuego.

Existe en un lugar del mundo una ciudad tan hermosa y tan deslumbrante que no necesita iluminación. Su color blanco resalta mas que el mismo Sol, sus habitantes siempre estaban felices, su hermosa ciudad era la envidia de todos los pueblos cercanos. Muchos de ellos habian intentado conquistarla, pero no conseguían pasar de las puertas de oro, diamante y hueso.

Orgullosos de su magestuosidad mandaron eregir un monumento, tan grande e impresionante como la propia ciudad. Muchos arquitectos, herreros, carpinteros, decoradores y demás se pasaron meses intentando encontrar la forma de crear ese monumento ha la ciudad y a sus habitantes. Tras unos largos meses de trabajo lo lograron. Crearon un objeto tan maravilloso que ni se imaginaban que llegaría a ser tan nefasto.

Una cosa que debo decir de este pueblo, es que la codicia y el egoismo son una de sus tres máximas. Eso es algo a tener en cuenta, ya que el objeto creado fue un diamante tan grande que ni cinco hombres podrían rodearlo, era de color verde y todo aquel que lo miraba se quedaba hechizado por su magestuosidad y aparente perfección, pero aun así era una creación del hombre, era imperfecto a los ojos de sus creadores, le faltaba esencia, le faltaba el reclamo, todos los pueblos deberían contemplar y admirarlo, sucumbir al deseo irrefrenable de poseerlo. De ese modo volvieron a reunirse para pensar en que podían hacer para crear otro objeto que sirviese de reclamo.

Con el uso de una magia antigua y olvidada fabricaron una campana de cristal que con su tañido todo aquel que lo escuchase se vería obligado a acudir a la llamada, pero su poder era demasiado grande, por ese motivo decidieron que sólo se debía hacer sonar una vez cada año.
Tras ponerla sobre el gran diamante, su maravillosidad era aun mas grande. Reflejos verde esmeralda teñian el centro de la ciudad dando un aura extraña.

Para conmemorar la finalización del "monumento" hicieron sonar la campana tres veces, tres tañidos insonoros, tres tañidos magicos que traerían la destrucción a la ciudad mas hermosa del planeta. Fuego, odio y destrucción fue el legado que dejo esa campana mortal, un reclamo para dragones, señores del cielo y la tierra, destructores de reinos, codiciosos e inteligentes.
Pero siempre, en toda historia hay algo que no cuadra, si hay algún entendido en dragones, podrá saber que estos de vez encuando logran un "milagro" mas halla de las leyes físicas o mágicas. Y es que del diamante nació una criatura pura, inocente y llena de vida, incomprensible para el mundo, del diamante nació una niña, una niña pequeña.

miércoles, 19 de marzo de 2014

Si alguna vez entráis en mi habitación, podréis ver que es poca cosa, una estantería con unos cuantos libros, una mesa llena de folios y dibujos viejos, una cama cutre, un par de póster y poco más.. simple, y la mayoría de esas cosas que tengo ni me gusta, simbolizan cosas que para mí, han muerto inevitablemente.
Salvo una cosa. Hay una única cosa que sigue latente... que se eleva por encima de todos los árboles retorcidos y sin hojas.

"Un fontanero borracho. Una rata amarilla hasta el culo de ácido. Un demonio llamado pasado, tan fuerte como un tornado de miedo. Un sistema que se hunde al ritmo de Hard-Rock. Papel, tabaco, Reggae y yerba. Una hoja con el mejor momento. Una bandera: verde, blanca y roja. Un chico, con sus cascos, aficionado del grunge, de ojos verdes y marrones, bajo una Luna con aire psicodélica. Una invitación en forma de obra de arte. "Draw your live"... sonrisas espontaneas pero verdaderas. Un gato, una hora, las 19:05".

Ganas de repetir, de volver a probar. Y todo esto en un trozo de papel, en una esquina, a la altura de los ojos.. unos ojos que se reflejan en un espejo, de mirada negra e indescifrable, lágrimas invisibles caen de ellos. La palabra 'error' escrita en la frente, una sonrisa torcida, el pelo largo y despeinado, sin cuidar, al igual que su imagen.. un vistazo rápido.. no se debe prestar mucha antención, los espejos son malos...

Unos ojos verdes me observan desde atras, una pobre sonrisa roja me consuela, una voz dulce me susurra que lo olvide, que me valla a hacer un viaje, largo, gratificante pero solo de ida. Sus manos, rodeando mi cuello, etereas pero reales, ahogando con fuerza, miles de ideas se lanzan queriendo derribarme, intentando entrar en mi mente, sólo una se abre paso aunque a duras pena...

...llegara el día en que todo sea como en tu sueño, pero esta vez sera real.

martes, 18 de marzo de 2014

¿Decepción tras decepción?

A veces pienso si de verdad hago lo correcto. Si con mis actos alejo a las personas o si son ellas las que se alejan de mí con los suyos. Si todo lo que hacemos a lo largo de nuestra vida, acaba teniendo sentido.

Cada mañana me levanto con las mismas ideas en la cabeza: "Un día mas en el que tendré que sonreír para no molestar a los que me rodean, sin saber cual es mi camino, sin saber que rumbo tomar, sin saber cual es mi lugar o como he de avanzar... lo único que hago día tras día es plantearme el por qué estoy aquí, para que sirvo, cual es mi objetivo, ¿existo de verdad? O solo soy un sueño dentro de otro sueño".

Mi vida no esta llena de felicidad, o mas bien soy yo el que no esta feliz. ¿Cómo cambiar eso? Pues ni idea. Intente hacer algo que me gustaba, pero acabo siendo una desmotivación, intente ser buena persona, pero sólo recibí mierda, intente buscar un "amor" pero sólo pude encontrar falsas esperanzas de un clon. Como un muñeco estropeado, voy buscando un juguetero que me arregle, sin éxito.

¿Luchar por lo que quiero? ¿Demostrar con actos palabras vacías? ¿Para que? Para ser ignorado, como siempre, para ser decepcionado, como siempre, para morir un poco mas y perder las esperanzas, como siempre. 

Porque aquí, en esta realidad que llamamos vida, esta llenas de almas atrofiadas e impuras que brillan por su ausencia. Almas que prefieren una vida triste y melancólica antes que arriesgarse. Porque como todos sabemos: sólo se gana jugando sobre seguro.
Me rio. No hay nada seguro en esta vida, no hay nada cierto, salvo que hagas lo que hagas, siempre pierde el que quiere más.

Otro día mas... otro día que deseo morir... otro día que solo hablamos de tonterias porque ninguno sabe que decir, pero siempre soy yo quien inicia la historia.. una historia llena de silencio, miradas y pasillos oscuros.

Bueno, ya han pasado 23 días... quedan 590 y cada vez lo veo mas seguro.

domingo, 16 de marzo de 2014

Os odio a todos, a todos y cada uno de vosotros, ojalá nunca os hubiese conocido, ojalá esta no fuese mi vida... no servis para nada... ni siquiera para entablar una estupida conversación. Humanos... la raza mas inútil, hipócrita, lujuriosa, avara e insociable del mundo. Que cada uno haga con su vida lo que quiera, yo no haré nada. Paso. Ya. no puedo mas... todo me supera..

Te odio Lucy... tú, puta zorra eres el causante de todo, sal de mi cabeza, deja de volverme loco, olvidame, haz como si nunca me hubieses encontrado... seria tan bonito que fuese real... pero no, ella esta dentro de mi, para que ella se valla, yo tendría que morir... :D siiiii hagamoslo, hagamos qu3 esta puta realidad desaparezca entre fuego y escombros... acabemos con esta representación, bajemos el telón, que el público aplauda y se marchen a sus casa, que por el camino de vuelta se olviden de todo lo que acaban de ver y que todos vuelvan a sus vidas, como el que cambia de canal...

Muerto en vida. Un zombie tiene mas carisma que yo. Una piedra es mas sociable que yo. Un reflejo es mas bonito que yo. Incluso un perro tiene mas valor que yo... es así. Mi vida es una mierda, dependo de personas inexistentes para hacer llevadero mi día a día... personas reales que lo dejaron de ser para ser una historia de final feliz en una hoja de papel arrugado... y lo mejor... lo mejor de todo... es que nadie leera esto. No perderan su valioso tiempo en un crio desquiciado que solo quiere llamar la atención porque a su parecer a tenido una vida de mierda cuando muchos matarian por tenerla.. solo soy un inepto, un despojo social, de esos a los que nadie echaría en falta, ni siquiera yo mismo me echaría de menos.. es así... para que amar, si puedes tener este odio constante dentro de ti jugando a ver cuando te hace explotar. Odio y solo odio, hacia todo, hacia todos, hacia mi... soy tan absurdo que es lo único que encuentro dentro de mi ser...

Sólo espero el día en el que las luces se apaguen.. dentro de 593 días.

viernes, 14 de marzo de 2014

Hoy he vuelto a tener el mismo sueño, agobiante, terrorífico y premonitorio, en el cual muero.
Cada muerte es diferente. Cada sueño discurre de una forma distinta. Pero el resultado sigue siendo el mismo. Dolor y miedo.

"Estoy sentado en un banco, el humo de mi cigarro es una niebla que me envuelve, un llanto resuena en mi oído izquierdo, un llanto silencioso pero audible en mi cabeza. El tiempo pasa deprisa, imagenes de personas pasan frente a mí, son conocidos, amigos, familiares.... sólo cinco figuras se han parado delante mia. Mirandome, esperando algo".

"Ya no es un llanto lo que oigo, ahora son gritos, tres personas yacen muertas en el suelo, el olor a polvora y a carne quemada, miradas de terror, de comprensión, de pena...."

"La rabia me embarga, aprieto el gatillo y otro cuerpo mas se desploma al suelo. Sólo quedamos tú y yo. Sólo los dos y una bala en la recámara. Miles de resultados... podría habernos matado a los dos, sólo a ti, a nadie, haber tirado el arma, haberme despertado, en lugar de eso, apunte al frente y dispare.
Caí al suelo frío, soñando, atesorando cada momento de mis últimos minutos, despertando".

Despertar de golpe, sin poder respirar, con un quemazon en el cuerpo que haría arrancarse la piel a cualquiera.... esos son mis sueños, esa es mi obsesión.¿Extraño no?

viernes, 7 de marzo de 2014

Una mirada al cielo (parte 2)

......................

Cuando Lucas me solto en la cara que estaba muerta, un remolino de sensaciones se hicieron dueñas de mi persona. Por un lado estaba contenta, era lo que habia deseado, ya no tendría que sufrir el acoso de mis padres, ni de mis compañeros de clase, ni la constante sensación de ser una inútil, no tendría que preocuparme de encontrar un trabajo, de hacerlo todo bien y ser servicial, no tendría que preocuparme de buscar un marido que me hiciese compañia para después discutir con él todos los días y que acabase con otra mas joven que yo... no, ya no pertenecía al rol de la sociedad. Ahora simplemente ya no estaba. Todos, al cabo del tiempo me olvidarían, pasaría a ser un vago recuerdo en una mente senil y destrozada. Por otro lado... estar muerta implicaba que no podría ver a mis amigos, no podría volver a reír con ellos, a sentir el tacto en mi piel de unas manos suaves, no viviria para disfrutar de esos pequeños placeres que nos da la vida, esos placeres que cuando estamos vivos no disfrutamos con la intensidad que deberíamos. Pero eso ya no importa.. estoy muerta, debo de asumirlo, ¿era lo que quería no? Ya no hay marcha atrás, tengo que ser consecuente.

-¿Y bien? ¿Ahora que eres consciente de tu muerte, qué haras? -dijo Lucas sentandose a mi lado.

Ahora que lo tenia al lado podía ver su rostro con claridad. Sus ojos de un verde intenso parecían ver mas allá del alma, sus labios, pequeños y bien definidos esbozaban una sonrisa cansada, una barba de 3 días le daba un aspecto envejecido, no paraba de dar golpecitos en su pierna con la punta de los dedos, nervioso.

+Bueno, ¿estoy muerta no? No puedo volver atrás...¿Ustedes los muertos que haceis para entreteneros?

Lucas solto una risa que resono en todo el bosque. Puso su mano sobre mi cabeza, me miro con dúlzura, y me pregunto:

-¿Te gusta la fiesta?

Asentí.

-Pues en todo el tiempo que llevo aquí no he podido hablar con nadie interesante, estos árboles no dan mucha combersación que digamos..

Se levanto y se acerco a uno de los árboles, este estaba partido por la mitad, metio la mano y saco un bajo, nunca había visto nada igual. El bajo era de un color morado metalizado con las cuerdas en azul. Se lo colgo y una sombra salió de el.

-Despertemos al bosque...

A partir de aquí todo se volvio una locura. La sombra que salió del bajo empezó a bailar al ritmo que marcaba Lucas, bajando y subiendo en una melodía casi enfermiza, el suelo vibraba deseando alzar sus invisibles manos hacía una Luna brillante como una perla. Parecía estar apunto de estallar, estaba hinchada de euforia, como si desease bajar de su pedestal en el cielo y unirse a lo que estaba a punto de pasar. Los árboles que antes estaban muertos y retorcidos se llenaban de vida, de sus ramas secas salían hojas de un verdor sobrenatural. El bosque cobraba vida de una forma extraña. Sombras de todos los tamaños y formas corrían de aquí para alla, susurrando, mientras Lucas tocaba su bajo con una habilidad anormal, de su instrumento llegaban a salir notas y acordes misteriosos que hacían que su sombra diera quiebros y movimientos frenéticos.

Mi cuerpo también se sentía atraido por su música y sin darme cuenta yo también estaba bailando alrededor del fuego, acompañando a la extraña sombra de Lucas, sin importarme nada, sólo sintiendo el ritmo, sumergiendome en un mundo extraño. Un lugar de sombras y oscuridad, donde todo el día estare bailando freneticamente en un éxtasis inducido. Sola, muerta y loca.

jueves, 6 de marzo de 2014

Una mirada al cielo (parte 1)

Me desperté con un dolor de cabeza horrible, desorientada y asustada, estaba en un bosque, era de noche y reinaba un silencio sepulcral. Me empezo a doler el pecho, volví a sentir ese dolor lacerante en mi corazón, las lágrimas empezaron a caer por mis mejillas, estaba desolada.

¿Dónde estoy? ¿Cómo he llegado a parar aquí? ¿Por qué soy tan desgraciada? Miles de preguntas asaltaban mi mente hundiendome cada vez mas y más en una tristeza que me corrompía. Durante lo que parecierón ser horas, me quede allí, sentada, junto al árbol donde desperté, reflexionando sobre que es lo que debería hacer. ¿Me quedo o me voy? ¿Me quedo en este lugar desconocido para mí o me voy a explorar un mundo aún mas desconocido? Soy una inútil para formular preguntas.. ni siquiera se que quiero.. no sé que debo hacer.. estoy perdida, quedarme aquí no me resolvera nada.

-Me voy.

Y así hice, poco a poco me incorporé y mire a las profundidades del bosque, había algo que me atraía de ese lugar, tenía que saber que era..

-Total, no pierdo nada por andar unos metros..

¿Metros? No se cuanto anduve, pero la caminata se hizo eterna, parecía que nunca se iba a acabar el bosque, no tenía noción del tiempo, ya que los árboles tapaban las estrellas y no me dejaban guiarme. Cuando desistí, cuando me dí por vencida, una luz a lo lejos atrajo mi atención. Había alguien en este bosque, no estaba sola. Presa de la euforia, salí corriendo todo cuanto pude, sin hacer caso a las ramas que azotaban mi rostro o desgarraban mis ropas... no estaba sola, era lo único que me importaba.

Conseguí llegar hasta la luz, era una pequeña hoguera hecha en un recondito claro. Busque con la mirada al creador de ese fuego, a la ansiada compañia, pero sin exito.. aquella persona que hubiese estado allí se había ido. Habia llegado tarde.. y como un trozo de hormigón tirado a un estanque, me derrumbe.

El dolor atravesaba mi pecho, las lágrimas caían a modo de chorros por mis mejillas, el único sonido que se podía escuchar era el de mi llanto. La impotencia me abrazaba, el odio y la ira me susurraban al oído, notaba como la tristeza me miraba, fijamente desde detrás mía.

Lo que paso después me cayo como un jarro de agua fría. Notaba como algo me observaba desde detrás, era de esas veces que notas un picor en la nuca, te vuelves y ves como alguien te observa, pues eso.

Me volví y para mi sorpresa no estaba sola, apoyado en un tocón, se encontraba un chico, mirándome en silencio con cara de circunstancia. Me sentí ridicula, me había puesto como una histerica, seguro que pensaría mal de mí, la he cagado.

El chico se levanto de donde estaba para arrojar al fuego un par de palitos. Se sento delante y con un gesto me invito a hacer lo mismo.

-¿Cómo te llamas pequeña?

+Mi nombre es Lucía y no soy pequeña, tengo 19 años.

-Ohh, toda una mujercita. Bueno, ¿se puede saber que haces en este lugar a estas horas?

+Me he despertado aquí... estaba en mi cama, deprimida, cerre los ojos y cuando los abrí... bueno me encontre aquí..

-Entiendo..

+¿Quien eres tú?

-¿Yo? Me llamo Lucas, vivo aquí.

+¿Vives aquí? ¿No es un lugar extraño para vivir?

-Sí, lo es.

Esa respuesta vino acompañada de una profunda mirada de tristeza. Pude fijarme que sus ojos estaban carentes de color, sin vida, vacios, no transmitian nada, era como si no estuviese.

+Hmm bueno.. dices que vives aquí ¿Qué es este lugar?

-Jaja, sí, llevo viviendo aquí cerca de 5 años, y como tú llegue aquí tras cerrar los ojos un día.

+¿5 años? Eso es mucho..

-Pues sí la verdad. Pero es como si sólo hubiese pasado 5 minutos. Aquí, el tiempo pasa más lento.

+¿Y eso? ¿Estamos en un sueño?

-Jajajajaja no, Lucía, no. En un sueño el tiempo pasa mas rápido, aparte no te acordarias de como has llegado aquí.. ¿pero te acuerdas no?

Esa pregunta me cogió por sorpresa, no me la esperaba. La verdad es que sí me acordaba de que hice antes de llegar aquí...
Estaba en mi cama, acababa de discutir con mis padres, llevaba unos días mal, bastante mal, no podía salir de la espiral depresiva que se había formado junto a mí, nadie se daba cuenta y todos me reprochavan que estaba ausente, que no hacía nada por cambiar nada... cada crítica era un puñal que se clavaba en aire. Así es como estaba en ese momento, era aire y como tal sólo quería escapar. Llevaba tiempo pensandolo, dandole vueltas al asunto, pero hoy ya explote. No aguantaba más. Cuando mi padre fue a llevar a mi madre a trabajar baje a la despensa. Alli, había miles de calmantes, de aspirinas, había un paraiso de pastillas de mil colores, tamaños y efectos. El único inconveniente era que las iba a pasar jodidas, por lo que sabia, morir a causa de pastillas era doloroso, producía vomitos y convulsiones, antes del fallo hepático. Si por desgracía sobrevivía, el labado de estómago iba a ser horrible.

-Veo que sí.. entonces, respondeme a una pregunta: ¿Dónde estamos?

Una extraña sonrisa se dibujo es su rostro, una sensación desagradable subia por mis pies, me costaba respirar, sentía como el pecho se hundia hacia dentro, una presión horrible sacudía mi cabeza.

+Es.. estoy muerta..

-Bingo!! -dijo poniendose de pie de un salto - Estamos muertos.

Todo mi mundo se me cayo encima al escuchar esa afirmación, no me di cuenta de la gravedad de mis actos hasta que escuche esa afirmación.

+Entonces..¿No puedo volver? +pregunte entre sollozos.

-Me temo que no, nadie puede volver a la vida una vez muerto.

Todo iba de mal en peor. Deseaba que todo eso solo fuese un mal sueño, pero sólo estaba muerta.

...............